ROSITA Y VASO DE AGUA (LAS EQUINAS COMPLACIENTES) "HISTORIA LOCAL" (Por: José Javier Durán Romero)

ROSITA Y VASO DE AGUA

"LAS EQUINAS COMPLACIENTES…"

Por: JOSÉ JAVIER DURÁN ROMERO (2010-2016)
CRONISTA OFICIAL DEL MUNICIPIO JOSE RAFAEL REVENGA-ESTADO ARAGUA -VENEZUELA
CRONISTA COMUNAL DEL CENTRO NACIONAL DE HISTORIA DE VENEZUELA

Una de las historias en nuestras investigaciones de historia local que me ha causado gran dificultad en escribir es esta, ya que como dice el dicho: - “me da peeeena apaaa…” o por como contar lo recopilado sin comprometer a los actores, que estoy seguro es el 60% de los hombres que tienen un poco más de 30 años en adelante en el pueblo de El Consejo y sus adyacencias.

Porque que en estos tiempos modernos, ya como decía mi papa: - “las gallinas andan detrás de los perros” y quien ahora tenga en su conuco, parcela o casa una “Burra”, hay que darle una “orden especial” por “protector de un patrimonio animal viviente en peligro de extinción”.

Por este motivo, decidí escribirla tomando como personaje principal imaginario a un jovencito de El Consejo de nombre “Nelito” para que todo aquel que allá vivido esta ociosa experiencia se sienta identificado con él, pero su identidad real no sea sometida al escarnio público…

Todo comenzó cuando Nelito era un carajito pueblerino de apenas doce años, ¡si..!,chamito, a esa edad cuando comenzaba a experimentar cambios físicos que por lo general, son de gran felicidad para cualquier muchacho curioso y jodedor de su época: bello en las axilas y en sus partes íntimas, espinillas, bozo, capacidad permanecer mucho tiempo en el baño, entre otras.

De lunes a viernes andaba como todos en sus actividades escolares, pero el fin de semana y en especial en vacaciones, era cuando incrementaba su disfrute con actividades deportivas como: pelotica de goma, fútbol, bicicleta, competencia de carruchas, etc. Y las tradicionales: papagayo, metras, trompo; pero la más importante, que le causaba gran felicidad y satisfacción era la de turismo comunal, “ir a bañarse en la laguna de Barrios, el río Tuy, La Bombita, la quebrada de Las Palomas, o los pozos de El Café…”.

Si, en esos andares es donde conoce las bellezas y bondades de la naturaleza y comienza a dar rienda suelta a sus impulsos hormonales desenfrenados.

Por lo general, después de darse un refrescante baño, comer mangos y echar chistes; se sentaba con sus compañeros a hablar de chicas comentando: -“que bonita esta fulanita…”, “ayer le di un besito a carlita la vecinita y sentí cosas raras allá abajo…”. Con estos cuentos sobre el sexo opuesto, por lo general terminaban incrementando más el tiempo del aseo personal o lo terminaban pagando las matas de cambures que había en el corral de la casa, las pobres acababan con un hueco, dobladas y maltratadas.

En esas jugadas anduvo un buen tiempo, divirtiéndose a plenitud, en cada tiempito libre salía a la calle a jugar y joder, tanto echaba vainas, que los vecinos se les molestaban por los escándalos y alborotos en la calle. Algunos impertinentes que no se aguantaban que los muchachos jugaran en la calle salían y les regañaban diciéndoles: - “muchachos el carajo… dejen la echadera de vaina, vayan a buscar “burras” pal Picacho nojoda…”. Fue en ese preciso instante, de tanta insistencia de mandarlos a buscar ese curioso animal, donde su imaginación más perversa comenzó a desarrollarse, entonces comenzaron las búsquedas y aventuras de zoofilias de Nelito.

Con el pretexto de ir a jugar en el estadio o andar en bicicleta, salía Nelito un sábado bien temprano con sus amigos vía El Picacho como le sugirió el vecino, hurgaban por los conucos del sector, entre los matorrales, en las vaqueras, a las orillas del río, por todos lados buscando, era difícil conseguirlas; y eso que en El Picacho según comentan los expertos en la materia, abundaba el tan codiciado tesoro garrapatoso.

En muchas ocasiones lo lograban avistar, se les acercaban con sigilo en busca de su captura, pero se percataban que el animal era macho y se le veía a distancia el “cardan” que presumía con orgullo, se frenaban inmediatamente y abortaban la misión. Cuando por fin encontraban una del sexo femenino, armaban nuevamente la estrategia de emboscada sorpresa, las chicas de cuatro patas muchas eran ariscas y no se dejaban capturar, aunque en ocasiones las hallaban tranquilitas y dóciles amarradas de un árbol, pastando o bebiendo agua.

Se les acercaban, las llamaban por cualquier nombre de mujer tratándola de apaciguarlas: - “ven Leonela...”,”quieta Matilde...”, “sooo Cristina”; cuando ya la tenían casi convencida para montarla en la olla, se aparecía un viejito formando lío con machete en la mano gritando: - “mira muchachos el carajo, que vaina es esa, dejen ese animal tranquilo, les voy a entrar a plan de machete carajo pa´ que no se metan con mujer ajena…”. Salían Nelito y sus amigos corriendo por esa bajada del cerro asustados huyendo del viejo arrecho por querer comérseles el mandado ajeno. Llegaban al río a pasar el susto y descansar, Nelito dice: -“verga tremenda vaina nos hecho ese viejo el coño, ya la teníamos lista pa´ la parrilla”, sus amigos le contestan: - “verga si…, y eso que había varias chicas, pero aquí en El Picacho todas tienen marido”, “ ¿qué vamos a hacer ahora?”, “vamos a lanzarnos pal Café para los pozos, allá dice mi primo hay dos que son mansitas…”, “vamos pues pa´ luego es tarde…”.

Tremendo maratón, de El Consejo al Picacho y del Picacho a El Café, hay que echarle patas, todo sea por las tan deseadas equinas. Al llegar a EL Café se tiraron un chapuzón sabroso en el Pozo Azul, Pozo Caldero y Pozo el Gallo. Que vaina más buena…, luego de un descanso se proponían Nelito y sus panas a buscar lo que por tanto rato habían caminado, dentro del morral los utensilios básicos o “estuche burrero”: una correa, cable o mecate para amarrarle las patas traseras, una zanahoria como regalo ya que no comen chocolates, no llevaban perola porque abundaban las piedras al igual que los palos para sobarle el lomo.

Buscaban y no las encontraban, de repente se presenta un Conuquero y les pregunta: -“¿qué andan haciendo por ahí… muchachos…?”, “aquí…, buscando mango ¿y usted?”, “uummm… buscando mangos, será buscando burras porque los que vienen para aca es a bañarse en los pozos y a eso mijo”, “¿ah sí, nosotros no… pero por aquí hay animales de esos?”, “claro mijo bastantes, pero mañosas y están pa´ las montañas adentro, las únicas dos que andan por ahí es Rosita y Vaso de Agua”, “¿si…, y usted las conoce?”, “claro mijo, esas son las mujeres de aquí, Rosita la pollinita y Vaso de Agua la mamá, que bueno la llaman así por qué no se le niega a nadie pues…”, “claro ya entendemos… y ¿cómo las conseguimos?”, “ja ja ja… a bueno pues…, viste que si andan en esa jodia, pero tranquilos yo pase por eso, ya se las voy a llamar para que se entretengan un rato, pero pendiente que Rosita es pollinita, pero es arisca mijo”.

El Conuquero echa como tres silbidos muy fuertes y se va diciendo: -“espérenlas aquí que esas ya bajan… y saben no se confíen de Rosita que es arisca, bueno mijo, nos vemos y que disfruten ja ja ja…”.

Nelito y los muchachos quedaron sorprendidos pero emocionados por los que es dijo el Conuquero, pero igual se quedan esperando a las chicas. Se meten otro rato en el pozo a divertirse mientras llegan, al cabo de unos 15 minutos se presentan a escena las actoras esperadas de esta historia. Adelante, la mamá “Vaso de Agua”, tranquila y serena como con gran experiencia en el contacto entre animal y hombre, detrás y con un poco de bríos “Rosita”, chiquita pero con cara de niña traviesa...

Nelito y los muchachos les palpitaba el corazón de la gran emoción al verlas, se peleaban cual era el primero en montarse y a cual le tocaba Vaso de Agua y a quien Rosita. Se ponen de acuerdo y comienza la actividad principal que los trajo tan lejos, los primeros en acción Nelito, los otros, bueno, como ahora es normal “en la cola, esperando su turno…”. Rosita ese día se portó de las mil maravillas, se olvidó lo briosa que era, pareciera que supiera que se iba a comer a esos primerizos muchachos.

Pasaron largo rato divirtiéndose y degustando tan exquisito manjar. Al terminar todos de gozar un mundo, dieron a Rosita y Vaso de Agua su merecida recompensa (las zanahorias), por lo favores prestados, se despidieron con afecto y retornaron a casa con la satisfacción más grande de su vida y que los marcaría por el resto de ella. Tan grande fue lo vivido, que se les olvidó volverse a bañar el en pozo y quitarse el olor peculiar de “burra enamorada…”.

Al llegar Nelito a casa en la tarde la mamá le pregunta: -“¿por qué llegaste tan tarde?”, “es que el juego de pelota estaba muy bueno y nos quedamos un rato más”. Pero madre es madre y sabe lo que su muchacho hace, aparte que olor lo delataba de aquí a la esquina y la mamá arrecha le dice: - “mira muchacho el carajo, ¿en el estadio jugado…?, si lo que hueles es a pura bosta y burra coño e´ tu maiii…”.

Le metieron la pela más grande de la su corta vida, lo dejaron como berenjena, a Nelito le dolieron los cuerazos, pero no le importó porque gozo como nunca en esa experiencia, tanto que lo siguió haciendo por muchos años más. Parece que llevara en su conciencia un refrán que voy a modificar un poco que dice así: -“garrapata con gusto y de burra no pican…”.

Durante años paso Nelito subiendo a El Café a descargar ese bestialismo indomable que tenía en su “interior”. Rosita y Vaso de Agua siempre complacientes, los esperaban para comenzar de nuevo la fiesta, gracias a Dios que estas bellezas no hablaban, porque si lo hicieran, habrían destruido muchos matrimonios y avergonzado a la mayoría de los jóvenes y no tan jóvenes de esa época…

nota: A todos las personas que colaboraron con esta historia, que no puedo nombrar, pero que tienen en su vivencia a un Nelito cualquiera de este bello pueblo… con respeto…

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PARA VER EL CALENDARIO DE ACTIVIDADES CULTURALES, RELIGIOSAS Y EFEMERIDES DEL MUNCIPIO JOSÉ RAFAEL REVENGA HAGA CLIP EN ESTE ENLACE:

CALENDADARIO DE ACTIVIDADES MUNICIPALES

José Javier Durán Romero
Cronista Oficial del municipio José Rafael Revenga - estado Aragua - Venezuela
Cronista Comunal del Centro Nacional de Estudios Histoticos de Venezuela

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